Sugerencia para la Asamblea Nacional sobre la Constituyente de Maduro
Gustavo Coronel
La grotesca e ilegal convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente hecha por el dictador Nicolás Maduro representa una seria amenaza para nuestra determinación de restaurar la democracia en Venezuela. Frente a esta amenaza los demócratas venezolanos no estamos haciendo lo suficiente. Nos hemos contentado hasta ahora con ridiculizarla, con hacer notar su ilegalidad, su naturaleza arbitraria. Nos sentimos reconfortados porque algunos miembros del régimen han manifestado estar en desacuerdo con tal medida. Pensamos que la medida es tan absurda que nadie la podrá tomar en serio en el mundo, ni nosotros ni nadie. No le estamos dando a la amenaza la debida respuesta estratégica. Por ello, corremos el riesgo de tener un mamotreto instalado en el país dentro de algunos meses. Y una vez que esté instalado será un mamotreto, sí, pero lo tendremos allí. Y ello será un hecho cumplido que tendremos como una nueva piedra al cuello. La estrategia de permitir a Maduro que avance en sus planes, confiando en que esta quincalla grotesca se vendrá abajo sola no es la más conveniente.
Entonces, ¿Qué hacer? La gran tentación sería la de dedicarle a esta pretensión un esfuerzo supremo de rechazo. Desconocer de una vez por todas a este narco-régimen criminal. Llevar al país a un estado de rebelión abierta. Esta sería una reacción justa pero correría el riesgo de que el mundo exterior nos considere ‘golpistas” cuando la realidad es que estaríamos actuando en contra de un golpe.
Hay una postura intermedia que se alinea con las leyes y la constitución y que debería ser tomada cuanto antes. Se trataría de que la Asamblea Nacional decida destituir a las jineteras morales del Consejo Nacional Electoral, esas mujeres quienes han abandonado todo pudor para entregarse en manos del gorilaje madurista. Esta destitución sería ajustada a derecho puesto que ellas están allí de manera ilegal. Esta destitución y el nombramiento de reemplazos haría abiertamente ilegal cualquiera acción de las jineteras morales para continuar montando el mamotreto. La otra acción de la Asamblea Nacional podría ser destituir a los magistrados de la Sala Institucional, quienes tampoco están allí de manera acorde con lo estipulado en las leyes venezolanas y quienes acaban de decidir que no es necesario obedecer a la constitución para seguir adelante con la constituyente de Maduro. Una acción de esta naturaleza por la Asamblea Nacional, totalmente enmarcada dentro de la Constitución, pondría al mundo en alerta.
Es indispensable desmarcarse claramente del narco-régimen. Si el narco-régimen, en represalia, procediera a disolver la Asamblea Nacional entonces habría que jugar la carta final, una masiva e indefinida huelga general. Creo que debemos actuar antes de que se concrete la grotesca quincalla constituyente de Maduro.
En la OEA hay un debilitamiento del bloque mercenario de países del Caribe, el cual puede colapsar en cualquier momento. Con o sin ellos la OEA tendrá que definirse en torno a la crisis venezolana. La mayoría de los países que están alineados en contra del narco-régimen venezolano tendrán que tomar una decisión, aun cuando ello llevara a una escisión dentro de la organización, la cual bien pudiera llevar a refundar la OEA, con la exclusión de los gobiernos parásitos del narco-régimen venezolano.
Fuente: lasarmasdecoronel.blogspot.com