Ruta a la transición marcada por @lortegadiaz
Robert Alvarado
Twitter: @robertveraz
Dejemos de ser hipócritas, para poder decir que sabemos lo que es hambre hay que haberla padecido o estarla aún sufriendo en carne propia”
Hermes Varillas Labrador
Con incredulidad, ingenuidad o claridad de conciencia hemos sido partícipes de una reacción en cadena generada por las declaraciones, acciones u omisiones de la Fiscal General de la Republica, Luisa Ortega Díaz, una vez que la Sala Constitucional del TSJ violó el estado derecho de los venezolanos, barbaridad que impulsó las protestas multitudinarias en la calle en procura del hilo constitucional (https://www.youtube.com/watch?v=g26w2iA0A5E) para vivir en democracia y libertad. Esos magistrados, cuyo dislate motivó la oposición fiscal, desde el inicios de sus andanzas en esos menesteres de meretrices han venido acumulando detrás del perfil oscuro de su personalidad pérfidas actitudes al margen de la ley, pero llega el momento que su misma conciencia los traiciona creyendo que se la estaban comiendo ultrajando a la mismísima Constitución, y ya no pueden seguir ocultando su procedencia, su origen y de la noche a la mañana, sin ton ni son, se les cae la máscara y quedan al desnudo ante la opinión pública como verdaderos delincuentes, hecho refrendado por el Departamento del Tesoro de los EEUU con su sanción a dichos amanuenses del dictadorzuelo.
Unos alaban la actitud de la Fiscal de la República y otros la descalifican como se vio en VTV, donde Pedro Carreño aseguró que Ortega tiene comportamientos propios de un desequilibrado mental, (https://www.youtube.com/watch?v=s1FOfZpXGe8) asimismo indicó que solicitará ante el Tribunal Supremo de Justicia una orden que permita someter a la Fiscal a pruebas psicológicas y psiquiátricas en manos de expertos. Otros salieron en defensa de ella por los medios de comunicación y redes sociales, a la par, diciendo cosas más denigrantes y ofensivas, le sacaron los trapitos al sol a Carreño con palabras que comparto con ustedes: “…Ese espécimen llamado Pedro Miguel Carreño Escobar fue BOTADO (expulsado) de las FAN en 1993 por robarse los reales de la cantina del Batallón donde trabaja en Barinas. El General de División Enrique Medina Gómez, su Comandante de Batallón fue el que le elaboro el expediente al Capitán (Ej.) Pedro Carreño por ladrón. Su nombre no aparece en la nomina del IPSFA como oficial retirado por haber sido expulsado de la Institución Armada por causa deshonrosa. No participo en las intentonas golpistas del 04FEB y/o 27NOV 1992. Se montó en el portaaviones de Chávez en el 98 para la Asamblea Nacional. Es el perro faldero y el mandadero de Cabello. Hoy es multimillonario, socio de Stefano… Es usado por ojitos lindos para estos trabajos sucios como el que hizo hoy contra la Fiscal General Luisa Ortega Díaz en Venezolana de Televisión. Es un rufián sin valores ni principios”. No son palabra mías, las dijo un alto oficial del Ejército, de esos que le leyeron la cartilla a Tibisay Lucena y aspiran retomar el hilo constitucional de la mano de Luisa Ortega estando en ciernes una decisión de la Sala Electoral del TSJ que por re o por fa dará mucha tela que cortar y algunas puntadas sin dedal.
La gente tomó las calles del país desde hace aproximadamente 60 días, demandando cambios. Dentro y fuera de Venezuela, la sociedad civil venezolana, en la voz de diversas asociaciones civiles y políticas, se encuentra envuelta en esfuerzos genuinos, con el propósito de resolver el conflicto que ha sumido a la nación en hambruna permanente, violencia programada y ataques sistemáticos al Estado de derecho desde el gobierno, generando caos, afectando el futuro de la sociedad venezolana, con el aumento de la polarización, incitando una guerra civil, que amenaza con desbordarse a nivel continental.
En ese contexto, muchos buscamos una ruta para la transición democrática venezolana, en sintonía con las inquietudes de la Fiscal General, sobre todo de cara al adefesio de la Asamblea Nacional Constituyente, porque en este país, tu país, mi país, nadie tiene derecho a imponer su manera de gobernar a otros. La razón es sencilla. En sistemas socio políticos que unos pocos se imponen sobre otros no existe justicia y sin justicia no puede haber paz, una triste realidad que nos ha costado entender y por eso en eventuales procesos de negociaciones que tengan impacto directo sobre las vidas de todos los venezolanos, la participación de toda la sociedad venezolana es vital. Solo pueden tener éxito, las conversaciones y debates en las que todos participen genuinamente y los venezolanos solo podremos comenzar a entendernos, cuando exista un compromiso serio con respecto al proceso en sí y todos seamos tomados en cuenta, porque somos iguales ante la Ley y merecemos ser tratados con dignidad y respeto, sin importar color de piel, raza, sexo, creencias políticas o religiosas.
Hablando de transición, en la perspectiva de retomar el Estado de derecho y la vida democrática del país, tal y como lo ha esbozado la Fiscal General, destaca la ruta que plantea Pablo Medina (https://www.youtube.com/watch?v=W-JLpryARFo) con una huelga general indefinida para incrementar la presión y de esa manera forzar la salida del régimen en una Venezuela donde actualmente una sociedad que desea vivir en libertad y democracia enfrenta a un régimen traidor que defiende los intereses de Cuba y Rusia; un planteamiento que muy bien puede servir para dar al traste con la convocatoria fraudulenta de la Constituyente. Según la propuesta de Pablo Medina, líder la Junta Patriótica, antes de que se pueda dar comienzo a conversaciones sobre el futuro de Venezuela, primero es necesario crear un clima favorable a las mismas, por lo que se pide:
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La excarcelación inmediata e incondicional de prisioneros y detenidos por razones políticas.
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Levantar las prohibiciones y restricciones a personas, asociaciones y organizaciones.
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La anulación de legislaciones que prohíben el libre ejercicio de derechos individuales civiles y políticos.
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Establecer responsabilidades y evitar la impunidad de los delitos cometidos durante este periodo de 60 días de protestas, en los cuales la juventud, base del futuro de la nación, tiene una participación preponderante y definitoria.
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Apertura de corredores que permitan la entrada al país de ayuda humanitaria.
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Las conversaciones entre todas las partes deben comenzar una vez que un clima favorable para el desarrollo de estas mismas haya sido creado.
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El debate entre la sociedad civil venezolana y un necesario gobierno de transición, debe comenzar con una declaración conjunta llamando a todos a un clima de discusión civil y respetuosa entre todas las partes.
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Los venezolanos, gobierno de transición y sociedad civil, comenzaran con el apoyo de la comunidad internacional, a definir el papel que va a jugar la comunidad internacional en el proceso.
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Las partes involucradas, han de decidir el proceso hacia adelante, detalles que serán negociados durante el proceso como tal.
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Todos acordarán a trabajar conjuntamente en pro de un gobierno de transición, que ha de ser integrado por representantes de toda la sociedad civil y que ha de administrar el país, supervisando lo acordado y actuando en un orden transicional y un llamado a elecciones.