“…No existe una empresa en Colombia que le saque más dólares a Estados Unidos que nosotros, Los Narcotraficantes…”
Pablo Escobar
Si tomamos en cuenta los indicadores de salud mental, todos los venezolanos estamos locos, no es para menos, la camarilla narcopsuvista caminando hacia una fase siniestra, con la instalación del estado forajido cristalizando la Asamblea Nacional Constituyente, agrava la crisis venezolana designando el Canciller ideal de la narcotiranía: bruto, prepotente, sinvergüenza y ridículo de Moncada (https://www.youtube.com/watch?v=ycA2xoBNgzw). Casi una copia de Maduro. ¿Será narco? Lo de farsante se sabe, bajo esa condición seguirá la labor de encubrimiento de la realidad llevada a cabo sin éxito por su antecesora, que sin capacidad para hacer frente a la creciente presión internacional, por limitaciones personales e inherentes a la gestión que representaba, enredó el claro propósito de la camarilla narcorrupta de eternizarse en el poder y seguir destruyendo al país, algo que, en la práctica, cada vez se dificulta más por la ola de protestas iniciada a principios de abril y que ha dejado casi un centenar de muertos.
Ciertamente, la ola represiva se concibió con un claro objetivo, neutralizar la calle como factor de cambio político, ahora bien, los errores estratégicos saltan a la vista como resultado de la falta de cohesión en el gobierno, sino pregúntenle a Benavides Torres por qué fue removido. Eso sucede por tener a Maduro más preocupado por Twitter que por la escasez, importando blindados de combate en vez de alimentos, usando lacrimógenas cerca de centros de salud y escuelas, resteado con la “Operación Tun Tun” y los militares gatillos alegres, torturando a militares y civiles, reprimiendo y allanando ilegalmente, de la mano del Defensor del Pueblo y el Contralor forjando documentos públicos, exorcizando el declive del salario ante alza del dólar paralelo, respaldando el acoso de colectivos al Ministerio Público, la lista es larga, indicios de la descomposición en el gobierno que lo colocan, para mayor desgracia, en un plano delictivo, específicamente inmerso en narcotráfico, no obstante, muchos comparan a Maduro con Pinochet. No ofendan. Pinochet fue un dictador, pero era serio y chileno. Maduro es un bufón cruel y extranjero.
Y aquí vienen las payasadas, que como es de suponer pueden llegar a ser crueles, la primera, una constituyente rechazada abrumadoramente por la comunidad internacional, incluyendo a El Vaticano, salvo los países que conforman el quinto punto cardinal de Maduro, en consecuencia, el CNE (https://www.youtube.com/watch?v=Lsz4TuycRek) validando más de 6.000 candidaturas a la Constituyente y publicando listado de postulaciones admitidas; el TSJ declarando inadmisible recurso de la Fiscal General contra magistrados “express”, pretendiendo anular al Ministerio Público y remover a su máxima representante; el jefe del Poder Moral mostrando en televisión actas con firmas forjadas; Maduro afirmando, “Venezuela no tiene Poder Legislativo”, al mismo tiempo, impidiendo ingreso de comida y medicina para generar más hambre. Suficientes indicios que acusan a Maduro, ministros, CNE y TSJ de cometer delitos, pero eso no les importa, a sabiendas de, por ejemplo, que decisión del TSJ sobre la Fiscal no tendrá ningún efecto, puesto que el máximo tribunal no tiene facultad legal para remover ni destituir a Luisa Ortega Díaz, (https://www.youtube.com/watch?v=dmd-yHWSuhg) asimismo que la Constituyente está fuera del marco constitucional, siguen adelante porque para la dictadura de Maduro la Carta Magna y las leyes de la República son letra muerta, así como los tratados internacionales en materia de derechos humanos, pero salió ilesa en la escaramuza de Cancún, México, ya que habría recurrido a mecanismos propios del mundo delictivo del cual forma parte.
Y aquí viene lo grave. Las decenas de personas que portando banderas tricolores interrumpieron sesión de la OEA sobre Venezuela al grito de “¡Asesinos!”, en protesta contra representación del régimen de Maduro, estarían en lo cierto, me comentan que los países del Caribe que defienden a Maduro lo hacen por ser parte de la ruta de la droga. Granada, Haití, Surinam, Trinidad y Tobago, y Antigua y Barbuda, sin olvidar a Cuba detrás de bastidores, salvaron a Maduro esta semana en la OEA. Siendo una triste verdad que todo narcotraficante es asesino, organismos internacionales disponen de pruebas que demuestran que quienes nos gobiernan son narcotraficantes, a quienes ahora les ha dado por transportar cocaína en gandolas de PDVSA, (http://www.miamidiario.com/sucesos/venezuela/pdvsa/narcotrafico/cocaina/incautacion/cicpc/pnb/ona/trujillo/mane-grande/783-kgs/376064) el Departamento del Tesoro adoptó y adoptará medidas al respecto, que sean asesinos, tampoco nadie lo pone en duda, menos ante las muertes de manifestantes como consecuencia del uso excesivo de la fuerza y después de anuncios en el ámbito militar que conllevarían a un aumento en las violaciones a los derechos humanos, así como la intención de controlar el país mediante la militarización, razones del cambio de sede de la Serie del Caribe 2018, tan sólo por citar un ejemplo que pareciera trivial.
Si es una vergüenza para la civilización cuando lo países solamente ven su interés económico inmediato, como lo hacen Bolivia, Ecuador, Nicaragua y países del Caribe en el seno de la OEA ante la crisis venezolana, (https://www.youtube.com/watch?v=XP1_eUP6TT8) es una desgracia que se asome la posibilidad de incidencia, negativa o positiva, según la perspectiva desde donde se vea, del narcotráfico en el sistema interamericano o en cualquier otro, riesgo que no se descarta cuando es “público”, según el Presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, que el régimen ha favorecido y protege a terroristas, los mismos que estarían involucrados en el ingente trasiego de drogas que por estos días habría evitado que la OEA lograra decisión sobre crisis en Venezuela. Estos asuntos los maneja el régimen con el mismo desparpajo del abogado de Podemos en España demandando penalmente por terrorismo al exilado Alberto Franceschi, con la misma barbarie con que subirán de precio Productos CLAP por tercera vez este año luego de comprarlas con sobreprecio, sin importarles, como no les importa el Conflicto con Guyana y se importa arroz desde allá.