El número de refugiados marca un nuevo récord de 25,4 millones
Laura Delle Femmine
Las personas que abandonaron sus hogares de manera forzosa ya son 68,5 millones, 2,9 más que en 2016.
Conflictos enquistados, persecuciones, terrorismo y hambruna siguen golpeando con dureza a un grupo creciente de población y vuelven a engrosar el número de refugiados, una cifra que ha marcado un nuevo récord mundial: al cierre de 2017 había 25,4 millones de personas beneficiarias de protección internacional frente a los 22,5 millones del año anterior. Así lo recoge el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) en su último informe Tendencias Globales. En total, las personas que abandonaron sus hogares de manera forzosa ya son 68,5 millones, 2,9 millones más que en 2016.
Mientras los Estados debaten el pacto mundial sobre migración, el primer acuerdo intergubernamental negociado bajo el auspicio de la ONU para garantizar una migración segura y ordenada, 44.400 personas al día fueron obligadas a huir de sus casas en 2017. El informe de la agencia de la ONU detalla que al cierre de 2017 había 25,4 millones de refugiados (casi 20 millones de ellos bajo el mandato de ACNUR y más de 5,4 bajo el de la Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo), 40 millones de desplazados internos y 3,1 millones de solicitantes de asilo.
Los sirios continúan siendo los protagonistas de esta dramática instantánea, con 6,3 millones de refugiados y 6,2 millones de desplazados internos, pero el deterioro de la situación en Myanmar, República Democrática del Congo o Sudán del Sur ha hecho que estos países ganaran cada vez más peso en las estadísticas. “No se trata de nuevos conflictos, es que el año pasado han sido especialmente virulentos”, detalla la portavoz de ACNUR en España, María Jesús Vega.
África subsahariana —principalmente por la situación en Sudán del Sur— fue en 2017 la región donde más creció el número de refugiados (6,3 millones), pero Siria, golpeada por un conflicto que ya ha adquirido una dimensión internacional, continúa siendo el principal país de origen a escala mundial de beneficiarios de protección internacional. Al cierre del año pasado, el aumento fue del 14% en lo que se ha convertido en una verdadera diáspora: los sirios que han huido de la violencia y la persecución ya están repartidos por 125 países; la mayoría de ellos se encuentra en Turquía, Líbano, Jordania y Alemania.
Afganistán también se mantiene como el segundo país de origen de refugiados (2,6 millones), la mitad de ellos desplazados en Pakistán. Pero el mayor repunte lo experimentó Sudán del Sur: el número de refugiados procedentes de este joven país sumido en una guerra civil se ha casi duplicado hasta los 2,4 millones. Otro repunte significativo lo vivió Myanmar tras la violencia que estalló en agosto del año pasado y que obligó a casi un millón de rohinyá, una minoría musulmana a la que la antigua Birmania no reconoce la nacionalidad, a cruzar la frontera con Bangladés para huir de lo que el mismo secretario general de la ONU, António Guterres, definió como una limpieza étnica.
Pese a la dialéctica antiinmigración de diferentes gobiernos y partidos europeos, continúan siendo los países en desarrollo los que más refugiados acogen: en 2017 cobijaron al 85% de los beneficiarios de protección internacional. Turquía, después del polémico acuerdo firmado con la UE para cerrar la ruta balcánica, es el país que alberga el mayor número de refugiados del mundo, con 3,5 millones de personas, seguido por Pakistán, Uganda, Líbano e Irán. Alemania es el único país industrializado entre los primeros 10 que más refugiados acogen, con cerca de un millón de personas.
El número de desplazados internos, por otro lado, ha descendido por tercer año consecutivo hasta los 40,3 millones de personas. Colombia encabeza un año más la lista con 7,7 millones de desplazados internos; le siguen Siria, República Democrática del Congo e Irak.
Solicitudes de asilo a la baja
El número de solicitantes de asilo ha descendido en comparación con 2016: al cierre del año pasado se registraron 1,9 millones de peticiones de protección internacional en 162 países frente a los 2,2 millones del año anterior. Por primera vez desde 2012, Estados Unidos fue el país que más nuevas demandas recibió, con 331.700 peticiones —procedentes principalmente de Guatemala, Honduras y El Salvador—, seguida por Alemania e Italia. Entre los países de origen con más solicitudes nuevas, Afganistán desplaza a Siria y se pone a la cabeza de la clasificación. En tercer lugar aparece Irak seguido por Venezuela.
Por otro lado, unos 2,7 millones de personas fueron registradas como refugiados por primera vez en 2017, el doble que en 2016 y cerca del récord registrado en 2014, cuando fueron 2,8 millones.